1979,
El nacimiento de un skinhead
Paul era de Londres y le gustaba el punk que en aquel momento estaba en plena efervescencia. Se fijó en que algunos punks utilizaban la union jack como atuendo y eso le fascinaba. Un día aquellos punks se raparon la cabeza y cambiaron la chaqueta de cuero por cazadoras bomber. El hizo lo mismo. También llevaban tirantes y como no, botas Doc Martens, habían resurgido los skins.
Paul empezó a frecuentar algunos lugares donde podía encontrar musica Oi!, que en ese momento estaba eclosionando, y ya de paso si había suerte, conocer a otros skins. En su barrio había herberts que solían ir al fútbol a cantar canciones que hablaban sobre el orgullo de pertenecer a algo, el honor por defender unos colores y/o un barrio y como no cantaban sobre las movidas con la policía y otros grupos rivales. El era del West Ham y comenzó a ir con algunos chicos que pertenecían a la Inner City Firm. Los mas gamberros del grupo eran skins y Paul se relacionó con ellos desde el principio. Con ellos fue a sus primeros conciertos de musica Oi!. Vió a Skrewdriver, 4 Skins, Sham69, Cock Sparrer... y era con Cockney Rejects con los únicos que no tenían problemas ya que eran del West Ham como ellos y a sus conciertos no solían ir bandas rivales.
Tuvieron peleas con gamberros de otras firmas como la del Milwall que tenían fama de ser los mas duros, sobretodo en su barrio. Paul lo comprobó personalmente en un desplazamiento que hizo con su firma al sur de la ciudad. Le rompieron tres costillas, le abrieron la cabeza con una botella de cristal y le mearon encima.
En una ocasión se lo llevaron preso por lucir indumentaria skin ya que algunos ciudadanos habían denunciado que unos skins habían hecho pintadas y habían tirado cócteles molotov a algunos establecimientos de pakistanies.
En la cárcel se enteró de que afuera en las calles había un partido político que estaba reclutando a skins para hacer su propia guerra contra la sociedad. Habían nacido los skins del poder blanco. Al salir de prisión se enteró de que muchos de sus amigos y conocidos skins se habían anexionado al National Front.
1982,
La pandilla esta de vuelta
Paul salió de la cárcel y se encontró con que sus antiguos amigos skins se habían hecho militantes del National Front. Skrewdriver ya no cantaba sobre ser punk y todas esas cosas sino que se habían convertido en skinheads y aglutinaban a todos estos bajo lemas como 'Rock Against Communism' o 'White Noise'.
El National Front estaba organizando conciertos para las bandas de R.A.C. del momento, teniendo a Skrewdriver como banda fetiche. Un día le propusieron ser miembro de seguridad de Skrewdriver ya que en la cárcel había aprovechado para ponerse fuerte y su aspecto era el de un tío peligroso, pero lo rechazó y se hizo miembro de seguridad de The Redskins. En un concierto en el que tocaban los que para ellos trabajaba con una banda de Escocia que estaba atrayendo a muchos skins a sus conciertos le reventaron el concierto durante la actuación de The Exploited. Una veintena de skinheads invadieron el escenario e hicieron un socavón en el escenario imposibilitando así la actuación de los demás grupos. En el siguiente concierto, el mismísimo Ian Stuart junto a una docena de skins, miembros de seguridad de Skrewdriver, agredieron con pértigas a los miembros del grupo que Paul protegía y a el le clavaron una navaja por tres lugares distintos de su trasero.
Poco después durante un concierto de Combat 84 se encontró con el skinhead que le apuñaló y le deformó la cara a base de puñetazos y a otro le partió un brazo cuando intentaba apuñalarle de nuevo. La cosa se fue poniendo fea en los conciertos de skins y Paul se estaba quedando solo por su negación a pertenecer al National Front, así que decidió colgar las botas y hacerse casual.
1986,
el mundial de fútbol
Paul estuvo con The Redskins hasta el final, los chicos cansados de ver como le linchaban y viendo que el no se rendia nunca dejaron de tocar por la propia integridad de su mejor miembro de seguridad y la de ellos mismos. Como recompensa le dieron 500 libras que se gastó en un boleto de avión para viajar a México donde se iba a celebrar el mundial de fútbol. Muchos de sus compañeros de Inner City Firm no pudieron viajar por ser considerados gamberros peligrosos y tenian prohibido abandonar el pais y menos para ir a partidos de fútbol. Paul como estuvo apartado del fútbol mientras trabajaba para The Redskins tenia su expediente limpio en ese sentido. Viajo solo y cuando llegó a México no sabia donde estaban los ingleses por lo que paso dos días solo en los que se enfrento a unos alemanes y a unos locales mexicanos que querían robarle. Al tercer día se encontró con sus compatriotas que en su mayoría eran gamberros y borrachos pero también había algunos skins como el, que eran de izquierdas, por lo que le conocían y le acogieron como a un hermano. En el campo trataron de llegar a la jaula donde estaban los ultras italianos pero no pasaron del primer cordón de seguridad ya que agredieron a los policías que intentaron contenerles y una brigada especial de la policía militar les detuvo y encerró en el torito. La final contra Argentina la vieron en su país ya que al día siguiente fueron deportados y con la entrada prohibida a México de por vida. Les hubiera gustado causar disturbios a causa de 'la mano de Dios' de Maradona pero prefirieron ir a un concierto de Angelic UpStars y cantar canciones de gamberros durante todo el concierto.
1990,
el año de los gamberros
Ese año fue espectacular en cuanto a la temporada que hizo el West Ham. Paul volvió a hacerse pasar por casual pero en el fondo era un skinhead y le costaba mucho disimularlo. Esa temporada conoció a Ken McLellan y se tomaron una cerveza juntos. Ken le comentó que necesitaban personal de seguridad porque últimamente tenían muchos conciertos fuera de la pérfida albión y necesitaban a alguien que les hiciera de barrera entre el grupo y los gamberros. Paul aceptó. El grupo de Ken era rock duro nacionalista con conexiones con el R.A.C. pero a Paul no le importó porque a parte de que le gustaba la nueva banda para la que iba a trabajar, había tenido problemas con los antiguos gorilas de The Redskins y quería tocarles los huevos yéndose con el enemigo. Y así lo hizo. Tocaron en Portugal con Guarda de Ferro, en España con Patria y Hermanos Blancos, en Italia con Claptrap y Klase Kriminale, en Francia con Legion 88 y Bunker 84 y en varios sitios mas de toda Europa occidental junto a grupos de ideología neo nazi y Paul era de izquierdas y aquellos gamberros le daban asco, tanto que en varios conciertos les dio algunos empujones a varios de ellos que no se atrevieron a plantarle cara. Acabó la gira con Brutal Attack y se echó una novia psychobillie con la que vivía en Camden Town. Por allí pasaba mucho pelao de por ahí y cuando veían a Paul paseando a su perro bulldog se querían hacer fotos con el porque era un mítico del movimiento skinhead inglés. Esa cerveza le llevó a la fama y Paul empezó a rallarse, tanto que dejo a la novia y se fue con el perro y sus cuatro miserias a España, mas concretamente a Málaga. Allí fue uno de los creadores del Frente Boquerón y al año siguiente la prensa calificó el fenómeno que estaba aconteciendo en el gol sur de La Rosaleda como el año de los gamberros.
1995,
el techno como criadero de skins
Paul gozaba de una vida placentera en Málaga. Creó su propia empresa de seguridad la cual se nutria de las peleas que formaban los gamberros del grupo que él junto a algunos autóctonos habían creado. Todo iba sobre ruedas hasta que descubrió la ruta del bakalao. Discotecas como Barraka, Puzzle o Chocolate fueron las primeras en caer y con ellas los chavales que acudían desde toda España y parte del extranjero. Las drogas de síntesis estaban pegando fuerte y mas de uno se quedó pallá. Pero lo mas fuerte es que esos jóvenes vestían como skins y a Paul eso le tocaba los huevos. Se pilló un piso a pocos kilómetros de la zona cero del sonido Valencia y se puso el mismo a despachar pseudo pelaos. En varias ocasiones los chavales se rebotaron con nuestro amigo guiri pero siempre salieron escaldados. Hasta que un día vinieron a buscarle unos de su edad y le pegaron un palizón a Paul, pero no fue tan fuerte como las palizas que recibió en su adolescencia cuando se enfrentaba con su firma a los grupos rivales. Paul no avisaba a nadie cuando tenia problemas, el sólo los solucionaba. Se enteró de donde eran esos valientes que le pegaron y les fue machacando uno a uno, sin problemas, tan solo con sus puños. Pero a las discotecas no paraban de llegar skins que le ponían negro, así que un buen día volvió a su querida Pérfida Albión con la esperanza de no encontrarse mas maquineros pero la realidad le dio con un canto en los dientes. El cantante de Skullhead se había hecho DJ de techno. Aquello puso enfermo a Paul y en seguida fue a buscarlo para endiñarle un buen correctivo. Fue en una warehouse, típicos lugares donde se hacían fiestas rave. Allí estaba el desgraciado ese con las botas tatuadas en la cara a modo de patillas y con una camiseta XXL de un equipo de futbol americano de mierda de los asquerosos estados unidos de América. El nivel de furia estaba sobre limites, con lo que podía matarle fácilmente si le enganchaba en ese momento, así que decidió irse de aquel sitio lleno de drogadictos y esperar a que las cosas siguieran su propio cauce...
1998,
problemas con los teddy boys
Paul había vuelto a Inglaterra asqueado de lo visto en España y estaba jodido porque sus antiguos camaradas se habían vuelto sus enemigos por hacer el tonto con los neo nazis. Ken McLellan estaba por ahí invitando a cervezas a ovejas descarriadas para reclutarlas en su séquito de gamberros. Hacia cinco años que había muerto Ian Stuart y el National Front pegaba sus últimos coletazos con la furgoneta de pre-campaña. Los únicos que seguían tan duros y firmes como siempre eran los teddy boys. Cuando Paul era un punk unos teddy boys le calentaron de lo lindo porque el chico ya apuntaba maneras desde niño ya que se presentó en el Black Raven, mítico pub que servía de cuartel general de los teddy boys de Londres y era la meca de los teds foráneos, y lanzó un pedrolo contra la fachada del local porque le parecía divertido increpar a esos tíos que parecían de otra época y llevaban grasa en el pelo... ese fue uno de los motivos por los que siempre a llevado la cabeza rapada ya que odia los peines y las tijeras, le parecen instrumentos de mariquitas. Pues que los teds siguieran tan chulos como siempre le tocó los huevos a esas alturas de su vida. Paul era así, de menos a mas siempre, superándose cada día, buscando el enfrentamiento con tipos duros de verdad, haciendo que las cicatrices merecieran la pena. Primero fue a mirar si estaba el Black Raven abierto y en su lugar encontró un supermercado de pakistanies. No obstante sabia donde encontrar a los teds, y se presentó en un concierto de Johnny Powers y Wanda Jackson junto a algunas bandas de teddy boy rock'n'roll que le parecieron espectáculos de la feria. Aun así esperó hasta el final de la actuación para hacer algo, sacar la maquinilla de rapar el pelo y rasurarle el tupe al mas chulo de todos. Casi le matan. Un navajazo en la cara casi le saca un ojo, una silla quedó hecha añicos tras volatilizarse sobre su espalda, acabó con todo el cuerpo contusionado por los zapatazos de los teddies, y saliendo de allí casi de milagro, pero se quedó a gusto.
2000,
colapso informático
Paul estaba viviendo en un piso patera de polacos borrachos, anti comunistas y futboleros a tope. Allí tenían un ordenador que a veces usaba para aplicar en la búsqueda de empleo. Se estaba haciendo mayor y ya no le daban trabajo tan fácilmente pero el seguía intentándolo y echando solicitudes de empleo a trabajos de lo mas variopintos. La mejor oferta que encontró era una que solicitaba amo de casa para asistencia total a importante señora de la nobleza inglesa. La carta de Paul decía así: Honorable Señora Rottenmayer, me congratula su sola existencia y divinidad angelical por la que el Sant George a dotado a nuestra gran nación de ultramar. Yo soy un caballero de las Españas, descendiente de Don Quijote de la Mancha e Isabel la Católica. Mi familia esta repartida por toda la geografía francesa incluyendo Corcega y el Quebec mas inglés que las joyas de la Reina Isabel II del sacro imperio romano. Poseo diplomaturas en electricidad de casas grandes, fontanería industrial, climatización de estadios y mansiones, cocina adelantada inglesa, pesca olímpica con gusano, jockey de carreras, de esto le hablare en persona, y esto no se lo digo a nadie pero soy bailaor de flamenco y danzas árabes de oriente medio inglés de Lawrence. Sin mas quedó a su merced para todo lo que usted me pida. Mi telefono para personas importantes es: 07123456789. Puede llamar cuando usted quiera y mas lo necesite. Sin mas le envio mis mejores esperanzas. Enviar. Piiiiiiiiiiiiiiiii. ¡Fuck, what the fuck, fuck fuckin' computer of fucks fuck! El ordenador entró en un estado de invernación en el que no contestaba ni a las ostias de Paul y es que era 1 de enero del año 2000 y el puto colapso informático del que hablaban por la tele llego a la casa de los Vladimir. Pobre Paul, estaba seguro que conseguiría el trabajo con esas inmaculadas referencias...
2003,
Paul graba un disco de Oi!
El piso de los polacos acabo incendiado en un pequeño percance entre los inquilinos... por lo que Paul tuvo que buscarse la vida y estuvo viviendo en la calle durante un tiempo. En las frías y húmedas calles del East End londinense conoció a un pakistani de cuarta generación que tocaba la guitarra, el bajo y lo tocaba todo, cocaína, éxtasis, lsd... un punk que hacia de hombre anuncio de las botas doc martens se puso a tocar la batería con ellos y un primo de Rashid tocaba la trompeta. Paul, sin lugar a dudas era el frontman definitivo. En su estancia en España había visto vídeos de los Decibelios y quedó fascinado por las performances del tío ese tipical spanish. La primera canción que compusieron se llamaba We are Fuckers. Y decia We are fuckers and we stole your happy meal. Lo demas eran todo temazos de musica Oi! ultra violenta y macarra a mas no poder. The Wankers not fuck era uno de los temas que por el solo de trompeta que gastaba hacia que el disco valiera 25 pounts. La portada era una foto de Paul meando en el rio Tamesis con unos bobbys pitandole al oido con el puto silbato de mierda que acabo en el rio. El nombre del grupo: The Strickly Fuckers are Fuckin' Mean Deltoyas, ah no, eso era el nombre del disco, ellos se llamaban The Lawmen. Paul no concebia de otro modo el nombre del grupo, el era el alma y pilar decisivo del grupo, al igual que Jimmy Pursey en Sham69 pero en guapo y peligroso. El primer bolo fue en el Elephants Head, mítico garito de pelaos del London Deep. Pues vinieron muchos pakis y punkies y los skins tuvieron que irse a mear a otro lao porque el lavabo estaba colapsado por folladores precoces que dejaron un pestazo a sexo chungo en el ambiente que solo de olerlo te pillabas un herpes. Cuando acabo el concierto Paul anunció que el próximo disco estaría dedicado a todos los que se acercaron esa tarde al concierto y que el que acababan de sacar tenia una tirada de 15 copias y solo quedaban 15. La gente se volvió loca y estuvo escuchando al grupo de Paul y sus ayudantes durante muchos años.
2007,
Paul Lawman tiene un hijo
El día que Paul se hizo musulmán se juro a si mismo que tendría por lo menos siete hijos, pero no estaba el horno para bollos y gracias que una tía muy guay se dejo preñar por semejante energúmeno la estirpe de los Lawman seguiría escribiendo la leyenda de la vida al limite en la historia de los tios mas extremos del planeta. La tía guay había sido hippie, le gustaba Creadence y esas cosas y fumar hierba. La luna de miel la pasaron en Casablanca y en ese viaje Paul vio la luz. El dice que fue Alá quien le bendijo con el poder divino pero todos piensan que tiene esquizofrenia debido al constante estress al que se a sometido durante toda su vida y también por los bicicletas que se metió durante aquel festival de musicas del mundo al que fue engañado por su mujer Afrika cuando estaban de novios. Afrika anteriormente había estado con un senegalés con el que se tuvo que ligar las trompas de falopio porque ese africano era un semental de mucho cuidao. Es por eso que Paul esta convencido que el fenómeno de la creación a sido cosa de Alá. Para agradecer a su Dios supremo Paul reza siete veces al día, un rato mirando a la meca y otro rato al estadio del West Ham porque Paul cree que los hammers son enviados de Alá aunque muchos aun no lo sepan, algún día les llegara la señal divina que les guiara por el camino correcto que desembocara en la coronación de la champions league y el triunfo de la premier league. Pero hay una cosa que es mejor que el exito del West Ham y es el nacimiento de su hijo Abderaman Lawman II de Constantinopla. Felicidades Paul, que seáis muy felices y forméis un imperio de súper hombres como tu.
2011,
la muerte hace su aparición
Fue durante un partido del West Ham, Paul estaba con su hijo de cuatro años en la grada joven, donde se ponían los que cantaban y le entró un yuyu. El médico brujo amigo de la familia dijo que entró en trance con su Dios y por un momento estuvo en el mas allá porque la muerte esta cerca. Las causas las desconoce, menudo médico pensó Paul, pero la verdad es que un súper hombre como él era difícil predecir de que iba a morir. Paul sintió miedo por primera vez en su vida, miedo por perder a su familia, por dejarles solos en este mundo de locos y empezó a cuidarse mucho haciendo deporte, tomando saunas, baños de vapor, hierbas medicinales y cualquier cosa que fuera buena para el cuerpo en su justa medida. Paul se había hecho mayor de golpe cuando nació su hijo, experimento una madurez increíble y asumió su rol de padre y marido con excelente resultado sin embargo algo le estaba avisando de que en el otro lado ya le estaban esperando. ¿Porque?, se preguntaba, ¿sera porque e sido un mal ejemplo para la sociedad durante toda mi vida?, ¡al contrario Paul!, le dirían los que le conocían bien, pero el estaba ofuscándose en que había sido muy malo y estaba entrando en una espiral depresiva propia de un enfermo mental. Su esquizofrenia iba mejor al menos. Se estaba medicando y por suerte el medicamento estaba haciendo su función, no obstante se engordó bastante y su aspecto era brutal. Quizás esa era la causa por la cual su cuerpo le estaba avisando, pero si se estaba cuidando, debería de mejorar tanto la depresión como el sobrepeso.
2018,
el bautizo de sangre
Abderraman ya era todo un muchachote y disfrutaba mucho jugando con su padre a las peleas de borrachos. Su padre le enseño infinidad de tácticas para knockear a un hombre, a como cubrirse y esquivar golpes, cuchillazos o palazos con tablas con clavos y sobretodo a ser leal y no golpear nunca por la espalda ni cuando el oponente esta en el suelo. Aquello era el código de honor de los gamberros de la Inner City Firm, que Lawman II se encargaría de resucitar por el honor de su padre y la nobleza del West Ham United. Un día la vida le puso a prueba, iba acompañado de su padre pero en verdad estaba solo. Unos cazacabezas del Chelsea se abalanzaron contra ellos y su padre no pudo hacer nada, vio como apalizaban a su hijo por llevar un polo del Inner City. Casi lo matan, su padre no entendía porque los matones del Chelsea le ignoraron por completo y se ofuscaron con su hijo, ni tampoco entendía porque no podía golpear a sus oponentes. Cuando llegó la ambulancia el chico pidió que les acompañara su padre y los asistentes sanitarios al principio dudaron pero luego pensaron que el pobre chico estaba delirando. Cálmate chico, avisaremos a tu padre en seguida, y Lawman II dijo pero si esta ahi... Aquí no hay nadie mas muchacho, ahora le avisamos tranquilo. Paul vio como se llevaban a su hijo en la ambulancia y el se quedó en aquel parque bajo la lluvia que empezaba a caer con fuerza. El chico se recuperó sin problemas de la agresión y cuando llegó a casa se encontró con su padre. Papa porque no viniste conmigo en la ambulancia, le preguntó. Veras hijo, estoy muerto y soy tu poderosa imaginación... ahora no llores y compórtate como un hombre, eres un Lawman y nosotros no nos cagamos por nada. Si papa.
Paul Lawman murió en el estadio del West Ham durante un partido de la copa de la reina a causa de un paro cardiaco unas semanas antes del enfrentamiento bautismal de su hijo.
Su mujer Afrika no se quiso hacer cargo de los gastos por defunción y el cuerpo de Paul fue donado a la ciencia. Muchos lloraron su perdida, otros la celebraron, pero siempre le recordaron como una gran persona.
FIN
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